El trabajo de SIT permitió la adecuación del Museo Sefardí a todos los visitantes
En 2011 el Museo Sefardí (Toledo, España) se convirtió en el primer monumento estatal adaptado a la visita para personas con discapacidad visual. SIT participó en este proyecto pionero ejecutando los distintos hitos museográficos que permitieron eliminar cualquier barrera de comunicación, convirtiéndolo en una institución 100% inclusiva. Un trabajo que fue financiado y desarrollado en colaboración con la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE) y la Fundación Orange.
La actuación consistió en la producción y montaje de un plano del museo en relieve, tres maquetas arquitectónicas, diez piezas originales y seis copias que se dispusieron a lo largo del recorrido expositivo. Todas ellas táctiles e identificadas mediante gráfica en braille y microcaracteres. La selección fue cuidadosamente realizada por la institución y comprendió desde un sillón del siglo XIX que se utilizaba para las circuncisiones y una lámpara funeraria, a la maqueta del artesonado y la reproducción de uno de los paramentos de la Sinagoga del Tránsito, donde se ubica esta institución dependiente del Ministerio de Cultura. Además, con la finalidad de conseguir un itinerario plenamente autónomo para los invidentes, el perímetro de cada uno de estos elementos fue marcado en el suelo con bandas texturizadas y se completó con una audioguía descriptiva. Al mismo tiempo, estas mejoras también supusieron el enriquecimiento de la experiencia cultural para todos los visitantes ya que fueron planteados como un recurso didáctico que ahondaba en diferentes aspectos de la vida cotidiana sefardí y de la arquitectura mudéjar.
De forma paralela a estas actuaciones la institución llevó a cabo otras destinadas al colectivo con discapacidad auditiva que, junto a trabajos anteriores que atendían a las personas con movilidad reducida, supusieron el pleno disfrute del monumento y de sus colecciones. Sin duda una experiencia que nos marcó.