Después de leer un interesante artículo publicado por el periódico Expansión, el cual refleja a la perfección el perfil actual de los empleados expatriados, me atrevo a realizar un pequeño resumen de lo que considero más importante.
Este artículo está basado en el informe “Global Movility Trends Survey 2015”, realizado por Cigna España (aseguradora global) y el Consejo Nacional de Comercio Exterior, el cual analiza al empleado expatriado partiendo de la premisa de considerarlo como un empleado estratégico y de alto valor para las empresas. Este informe recoge las opiniones de más de 2700 personas expatriadas distribuidas por más de 156 países.
Advertimos varios datos interesantes, el primero de ellos, el que nos arroja que el 81% de los expatriados son hombres de mediana edad, ya que el 59% ronda las edades comprendidas entre los 35 y los 54 años.
Los destinos a los cuales acuden estos empleados suelen ser mercados emergentes o lugares remotos, por lo que, la norma general es que las familias aguarden su regreso en el país de origen. Las cifras avalan esta norma general, con un 42% de familias que se quedan en el país de origen. Solo un 17% son personas solteras.
Las empresas valoran estos empleados como estratégicos, y esto se refleja en el dato que nos aporta el artículo, ya que el 70 % de la facturación de las empresas españolas que cotizan en bolsa, proviene de las actividades llevadas a cabo y desarrolladas por los empleados expatriados, aumentando año a año, el número de empresas que dan el salto a otros países. Los denominan estratégicos, ya que desarrollan más de la mitad de la facturación de las empresas, y eso supone un valor añadido.
La mayor parte de las empresas que ofrecen estas oportunidades de expatriación, son aquellas dedicadas a los sectores de energía y tecnología, sin olvidarnos del sector de la banca y las constructoras, siendo el sector de la banca, el que cuenta con más beneficios para el empleado a la hora de la expatriación.
Podríamos considerar que la movilidad se está convirtiendo en un reto tanto para empleados que comienzan como para altos directivos, ya que los desplazamientos implican una adaptación tanto al nuevo entorno como a la cultura que aplique en el país de destino. Asimismo, se debe añadir, que el expatriado se deberá integrar en un equipo multicultural, con el impacto que eso conlleva a nivel social y político.
Por todo ello, la oferta de una expatriación será valorada por el empleado como una oportunidad de crecer tanto en el ámbito profesional como personal, pero teniendo en cuenta la calidad de vida del destino, el paquete de beneficios que le sea asignado y la atención sanitaria de la cual va a disponer, siendo este último uno de los aspectos que más preocupación puede dar al empleado (el 79% de los expatriados tiene atención médica privada durante su desplazamiento).
Como reflexión personal y basado en mi experiencia, la movilidad internacional está en un momento de expansión importante, contribuyendo no solo a la formación y crecimiento de los empleados, sino directamente, sobre el ascenso de las empresas que invierten en ello.
Desde SIT brindamos la posibilidad de que contactéis con nosotros para resolver cualquier duda.
Contacte con nosotros por la página web o via mail relocation@sitspain.com
