SIT realizó en 1992 el traslado al Museo Reina Sofía desde el Casón del Buen Retiro, donde también lo habíamos instalado en 1981
La pasada semana se cumplieron 25 años del traslado del Guernica desde el Casón del Buen Retiro hasta el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
Este transporte, aun tratándose de apenas 1 km, fue realmente complicado en sus aspectos técnicos debido al gran tamaño de la pintura y a su delicada condición de conservación. Nuestros técnicos de SIT diseñaron y fabricaron una caja muy especial para la ocasión, así como estudiaron de forma pormenorizada hasta el último detalle de los procesos de manipulación, embalaje y transporte.
El principal reto desde el punto de vista técnico fue el transporte de la obra sin desprenderla de su bastidor, sin enrollarla. Y para conseguirlo tuvimos que modificar el techo de uno de nuestros vehículos para que permitiese transportar la obra en posición vertical, de forma que la obra pudo entrar por el techo con la ayuda de una grúa que elevó el cuadro – en su caja – por encima de la altura del camión. Fue una operación muy mediática y espectacular que aquel día abrió todos los telediarios.
Pero ahí no acabaron las complejidades del traslado. El acceso a su nuevo emplazamiento en el Reina Sofía conllevó también sus dificultades de movilidad, utilizando un montacargas de gran formato y realizando giros para abrir camino hacia su nuevo hogar.
Los dos últimos movimientos de la obra de Picasso, su vuelta a España desde Nueva York en 1981 y este del que se acaban de cumplir 25 años; fueron perfectamente ejecutados por SIT, teniendo una repercusión internacional sin precedentes. Con todo ello, nos sentimos muy orgullosos de haber participado en la historia reciente del Guernica, estando esta íntimamente relacionada con la historia de SIT.
